miércoles, 27 de octubre de 2010

EL Gallo





Por Carlos Vicente Torrealba

carlosvicentetorrealba@gmail.com

twitter: @cartorrealba



Cuando yo aún era un niño, una de mis tareas en el hato era darle la comida a las gallinas. Había un gallo pinto que era una hermosura, pero sumamente bravo y yo le temía ya que al echarle el maíz siempre me picaba. Un día abrí la puerta del corral y dejé que saliera para poder alimentar a las gallinas con tranquilidad. Al terminar la tarea, se me olvidó meter el gallo; como a las dos horas el corral era un desastre, todos los pollos se peleaban y casi estaban muertos hasta que mi padre me pidió que metiera de nuevo el gallo y todo se calmó.



Hoy el país político que tenemos me recuerda ese corral del gallinero del hato donde me crie. Sale el presidente fuera del país y el partido se vuelve como ese gallinero a tal punto que uno no sabe cuál es la verdadera oposición contra el gobierno de Chávez, si los llamados MUD o de los propios camisas rojas



Unos funcionarios quieren despropiar todo lo productivo del sector privado, mientras otros pretenden despropiar el propio Estado, como el diputado electo a la AN Aristóbulo Istúriz. Este nos señala que hay que "desmontar las alcaldías y gobernaciones” ya que a su juicio, esto es un paso indispensable para el avance efectivo del proceso de cambios socialistas en Venezuela.



Particularmente conozco de hace muchos años a Aristóbulo y su forma particular de hacer política muy exitosa en el aspecto de forma, pero demasiada confusa e inoperante en el fondo. Hace unos meses atrás, éste señaló lo mismo. El presidente públicamente dijo todo lo contrario. Ahora por qué insiste Aristóbulo en “desmontar las gobernaciones y las alcaldías” y por qué lo va a sustituir. Acaso centralizar más las funciones del gobierno generando un estado inorgánico donde la voz del pueblo sea tan sólo un eco.



Todos sabemos que el Estado Venezolano constitucionalmente posee instituciones como las gobernaciones y alcaldías, cuyos funcionarios son elegidos por el pueblo para la administración de la misma ¿Pero Aristóbulo, desconoce aún esto?.



Lo curioso de todo, es que Aristóbulo confunde o trata de confundir socialismo con anarquía, un sistema político donde se pesca en rio revuelto y él es muy hábil en eso de como echarle la culpa a otros y como utilizar las fuerzas de otros. ¿Qué busca en el fondo Aristóbulo al introducir semejante tema en la actualidad? o será porque el gallo no está.

Las Notas desde el Chinchorro Sutra


Por Carlos Vicente Torrealba
chinchorrosutra@gmail.com
Chinchorro-sutra.blogspot.com

“Cuando las mujeres nos aman, nos perdonan todo, incluso nuestros crímenes;
cuando no nos aman, no nos dan crédito por nada, ni siquiera por nuestras virtudes”
Balzac.


El Fluir



Se dice que no es posible introducirse dos veces en el mismo río, ya que el rio cambia porque las aguas frescas están en un continuo fluir y es que no sólo el rio cambia. Es que todo en la vida va cambiando y eso es bueno cuando tu también te encuentras es ese maravilloso fluir.



Hay gente que se empecina a no ver esos cambios y tratan por todo los medios estar atados a algo, ya sea una experiencia, una red social o ideológica, una institución o un simple trabajo. Lo curioso es que ellos no se dan cuenta que esas instituciones cambian, que la gente surge y se moviliza a nuevas posiciones; los que se niegan afluir no tratan de enfrentarse a un foro de mayor magnitud, prefieren seguir estando en las pequeñas escuelas rurales hablando lo que allí nadie puede entender, porque ya sus palabras también cambiarán dando sus propias vivencias llenas de aprendizaje. De ahí es el mayor fluir, porque de la movilización social, cultural y laboral, son muy pocos lo seres que hacen lo mismo toda su vida sin evolucionar. Pero lo peor, son muy pocos los seres humanos que se dan cuenta que ellos también están cambiando y quieren ingenuamente seguir introduciéndose en el mismo rio cuando éste ya no está ahí.




El último minuto antes de la sexualidad



Un lector me pide un consejo: ¿Qué hacer si ella dice que no, después que nos hemos besado?. Aunque el amigo no señala cuantas veces esto le ha sucedido voy a darle entonces dos consejos. El primero, si ha pasado pocas veces es común que esto pueda suceder, y si ella te ha manifestado por ejemplo: “No te conozco lo suficiente” si esto fue así, no te enojes o te molestes, no le salgas con una de niño malcriado, sólo dile a tu amiga “Lo entiendo” o “Está bien, este tipo de respuesta suelen ser elegantes y hasta bonitas, pero eso sí insiste, regresa y siguela besando. No sólo en su boca, ella también tiene cuello, orejas y todo un cuerpo para besar y si esto volviera a suceder usted amigo diga “Lo entiendo” y regresa a seguir besándola, y repítelo hasta que ya no siga sucediendo. Eso si jamás un hombre lucha o forcejea con una mujer. Eso es otra cosa, un hombre siempre puede insistir como un hombre hasta que ella diga que si o que no definitivamente. La segunda recomendación es que si has salido con ella por un periodo de varios meses y continúa con esto, usted tiene dos cosas que hacer: dejarla y buscarse a otra o aprender a besar para que no lo rechacen. Amigo lector, ser persistente es bueno pero jamás obligues a una mujer hacer lo que ella no quiere… eso nunca.



Las relaciones están basadas en la atracción

Si amiga lectora las relaciones armónicas, sanas y creadoras debe estar basadas por la atracción. Cuando los motivos son otros, usualmente tratarán mal a la otra persona o no le regresarán la atención de la misma manera. Si quieres una relación duradera esta se construye con respeto, afecto, deseos y surgirá el amor.



Recuerda que la traición además de hacérsela a su compañero o compañera, primero él o ella se la hace a sí mismo. Los celos en cambio suelen ser por inseguridad, o por creer que el otro miembro de la pareja, sea ella o él posee deseos ocultos, ya que siempre están buscando a un sustituto. Si esto es así en vez de celar, lo que tienes es que olvidarte de esa relación, de entrada no vale la pena. Si tú tienes una pareja y no sientes afecto por ella en el sentido de pasión y deseo, lo harás sentir de alguna manera insegura y si fuera lo contrario, que en tu atracción a tu pareja hay lazos afectivos fuertes, pero él no siente nada por tí, esto te hará sentir mal todo el tiempo. Una especie de síndrome al estilo “la única gente de la que me enamoro no se enamora de mi”, quizás es el tipo de relación mas común en estos días.





Ruptura y qué?



Un lector me pregunta ¿cuándo debe terminar una relación?. Apreciado lector, si una relación se pone mala, o hace daño, o se está convirtiendo en una “amistad” abusiva o algo por el estilo, “termínala por completo”, y ese dolor se te pasará más rápido. Los tipos de relaciones conflictivas, toxicas e inmaduras te quitan la energía de otras áreas de tu vida. Intenta evitarlas a toda costa, pero si te encuentras en una de ellas, ¡Huye! Busca a alguien que te valore y respete que no tenga problemas, que su meta no sea el pasado.




La Voluntad



Saben amigos, todo lo que necesitamos en la vida es la voluntad, así como yo he tenido la voluntad para vivir y amar al que me ama, también debo tener la misma fuerza para decirle adiós al que ponga los intereses colectivos de la pareja a un lado por sus intereses particulares. La sexualidad es uno de los lenguajes más bellos que la naturaleza le ha dado al hombre, ese lenguaje debe poseer doble dirección.



Jamás permita que ese lenguaje sea solo de un sólo lado. Usted da todo y el otro o la otra no da nada. Entonces empiece a amarse a si mismo, tenga la voluntad para hacerlo y quédese con los bellos recuerdos de aquella persona. Dese un tiempo para volver a empezar a construir nuevos futuros recuerdos con alguien que si lo valore.

Ménage à Trois




Por Carlos Vicente Torrealba

carlosvicentetorrealba@gmail.com

Twitter: @cartorrealba



Una vez una amiga a la que quise mucho me preguntó en medio de la sabana, ¿Cuándo las estrellas perdían su intensidad?, ya que los lebrunos se alzaban con el amanecer. ¿Sabes cuántas veces nacemos y morimos?



Yo me detuve a contemplar los haces de luz que empezaban a teñir el firmamento, mi mirada se poso en ella con la mayor ternura que se puede dar en una despedida, y le dije: nacemos y morimos muchas veces. El nacer es ir hacia la vida, de ahí que nuestra vida tenga muchos nacimientos y el morir es cuando algo termina o cesa. No sólo morimos físicamente, también mueren etapas de uno con sus ilusiones y hasta objetivos.



Yo he muerto varias veces y he resucitado gracias al calor y al abrigo, ante todo de mi mismo y desde luego gracias a la ternura de una mujer o la sonrisa de mis hijas, o a la presencia de mis padres que son mis ángeles y el alimento de mi alma como si fueran el pan de trigo. Pero no importa como morimos o como nacemos lo importante quizás es como vivimos cada etapa de nuestra existencia.



Fue la última vez que hablé con la que fue mi amiga, antes de convertirnos en dos extraños. Quizás esas últimas palabras fueron el epitafio de un largo viaje que llegaba a su fin, para que cada uno pudiera renacer con el propio dolor del parto, del adiós sin un hasta luego, pero con la experiencia de lo ya vivido.



Hoy he recordado ese momento, aunque no estoy en medio de la sabana, ni el cielo está estrellado, ni despunta el alba; aunque estoy renaciendo con otra compañera de camino. Pero es que no entiendo la política de mi pueblo, este pequeño caserío que aún es palúdico lleno de una burocracia enfermiza donde los menos son más y los más se tragan hasta su silencio.



No entiendo, con tantos logros en diez años tan sólo el chisme y el barrial sea lo resaltado. No entiendo que una gira presidencial que viene cargada desde acuerdos atómicos hasta las computadoras para nuestros hijos, quede empañada con un desprópiese a una fábrica de vidrio que se dio a conocer por el célebre secuestro de William Frank Niehous un 27 de febrero de 1976.



No entiendo este Ménage à Trois entre burguesía, socialismo y vivismo criollo. No entiendo que lo importante sea lo inmediato y lo trascendente tan sólo una nota de referencia, no entiendo un país que muere y que renazca muriendo.